Camaleón, el político

Camaleón, el político

Nota causal. El presente cuento se escribe luego de leer diarios de varios días y semanas, no sólo de todas las tierras mexicanas, y lo dedico a las buenas personas que creen aún en la política en su sentido más noble.

Va el cuento: Camaleón XY creció en la tierra como crecen casi todas las cosas, con un poco de esto, con un poco de lo otro, con cosas a favor y con otras en contra; pero con tres cualidades extraordinarias: una es que podía adoptar la personalidad requerida en cada caso; la otra cualidad es que tenía una lengua larga y rápida, tanto en sentido físico como para decir palabrería y media, y finalmente tenía la cualidad de que sus ojos abarcaban una visión periférica por mucho superior a la del promedio de todas las personas, esto es, que de algún modo podía ver más allá de la superficie de las personas.

Por otra parte, Camaleón XY tenía una eterna levedad ética, que le hacía lo más pragmático en cada caso.

Poco importa si Camaleón XY provenía de una familia acomodada o si venía "de abajo", lo importante es que sus cualidades eran extraordinarias y que, por otra parte, tenía ambiciones muy hondas en todos los sentidos y a cuyo servicio se encontraban sus cualidades. Más tengo cosas que me agraden, más quiero, decía de manera constante Camaleón XY, o bien, decía de forma reducida: Yo quiero más por más.

El gran problema de Camaleón XY, sin embargo, era que otras cualidades, como la honestidad, la sinceridad, el saber, la bondad, la solidaridad, la justicia, poco o nada le habitaban y eso de algún modo limitaba la realización de sus ambiciones, en un medio en el cual por convicción propia o por ventaja los demás cuestionaban que esos valores no se cumplieran.

Por eso, Camaleón XY entró a la política, pues todo mundo decía que ahí se "ganaba" mucho si tenías labia, si sabías hacerla y que las reglas se hacían a modo o se rompían si era necesario, pero con el cuidado de que no se visualizara que estaban hechas a modo o su rompimiento, que lo importante era la imagen que tuvieran de ti los demás y no lo que eras.

El comienzo no fue tan fácil, pero poco a poco Camaleón XY comenzó a prosperar, haciendo uso de sus "cualidades", así, por ejemplo, si le convenía presentarse como el más respetable, lo hacía, si como triste, lo lograba, si como bueno, pues era el más bueno o como malo el más terrible. Ni qué decir de su labia, endulzaba todos los oídos que tenía que endulzar y en cada caso, hacía lo que tenía que hacer para lograr sus cometidos personales, por más oscuros o ruines que fueran (aspiraciones y medios), pero cuidando siempre que no se conociera su ilegitimidad y que su imagen no se mostrara como era.

Camaleón XY pudo así robar a manos llenas, tener aposentos ricos y lujosos, que le rindieran homenaje, conocer el mundo, aspirar estimulantes, beber, vejar, traicionar, tener amantes por la buena (oferta de dinero, cargos…) o por la mala, hacer justicia en los bueyes del compadre, incluso, tuvo el poder de llevar al cielo a cristianos y cristianas (aunque hay que reconocer que no todo Camaleón semejante a XY lo hace).

Camaleón XY se desarrolló de forma inusitada y al paso de un largo tiempo miró alrededor de su pedestal y a su base, y vio más y más camaleones, como él, entonces pensó: el ejemplo cunde y todos esos camaleones ahora luchan por lo mismo que yo, se mimetizarán, endulzarán oídos, harán cuanto tengan que hacer más allá de sus capacidades, para llegar  a disfrutar lo que disfruto y en ese camino, quizá me ataquen a mí, se deshagan de mí.

A Camaleón XY no le agradó su futuro probable en un mundo de camaleones como él, y entonces creyó que las amenazas que invisibles se filtraban sobre él, se podían atajar justamente con todo lo que él no tenía: honestidad, sinceridad, saber, bondad, solidaridad, justicia y luz, mucha luz.

Camaleón XY hurgó en su interior, buscó al menos una pizca de esos valores, pero no encontró nada, absolutamente nada, nunca le habitaron.

Entonces Camaleón XY tomó la resolución de esperar la lucha inevitable con todos los otros camaleones que deseaban lo que él tenía, y luego de que se dio la lucha, la perdió en algún momento frente a otro camaleón, y dejó de ser, no sin antes robar, poseer, viajar, intoxicarse, vejar, traicionar, violar, estuprar, acosar, hacer justicia selectiva, privar del ser a otros, engañar y quizá ¿arrepentirse?

Más vistas

No stories found.
logo
Mi Morelia.com
mimorelia.com