Por: Andrea Hernández/ @andy_hermar
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- El mediodía llega y el aroma de suculentos antojitos mexicanos comienza a inundar el Mercado Nicolás Bravo, un referente gastronómico en la ciudad donde puede encontrarse un amplía gama de manjares, espacio que recientemente fue remodelado para mejorar sus servicios.
Los oferentes de comida en el también llamado Mercado del Santo Niño proyectan en cada uno de sus platillos años de tradición y enseñanza familiar, los cuales salen a relucir sobre todo en la época de Cuaresma, cuando manjares a base de pescado, verduras, mariscos y platillos típicos de la época más calurosa del año se venden "como pan caliente".
La señora María Eugenia Herrera ha ofrecido sus manjares en la segunda planta de este mercado desde hace 12 años, una tradición que heredó de su mamá, quién por más de 20 años estuvo al frente del restaurante Las delicias de Maru.
Afirmó que desde hace años la época de Cuaresma marca un parteaguas a lo largo del año "en esta época cambiamos nuestro menú, aunque continuamos preparando algunos platillos con carne porque hay gente que lo pide, 70 por ciento de lo que guisamos son recetas de la época", comentó.
Tortitas de camarón, chiles rellenos, carpas doradas, torresnos de papa, caldo de pescado y capirotada, son parte de los manjares que se encuentran en ese espacio cuya oferta principal es la barbacoa y el tradicional menudo.
Mariscos, pozole, tacos dorados, tostadas, sopes, quesadillas y tacos de guisado forman también parte de la oferta del también conocido como Mercado del Santo Niño que por años se ha caracterizado por la venta de corundas cuyo precio oscila desde $1.50 la pieza.
Sea Cuaresma o no, este lugar es una gran opción para deleitar el paladar, es por ello que entre sus visitantes recurrentes se encuentran desde estudiantes hasta empleados de dependencias de gobierno que pueden desplazarse caminando al mercado que según doña María Eugenia "está a unos pasos de la vida cotidiana del Centro de la ciudad".
