Banxico y la tasa de interés

Banxico y la tasa de interés

Estimados amigos de MiMorelia.com, permítanme enviarles un cordial saludo este día y aprovecho para platicarles acerca del más reciente anuncio del Banco de México en materia de política monetaria: la reducción de la tasa de interés, decisión efectuada en dicho sentido por primera vez desde hace más de 5 años.

Para ponernos en contexto, a partir del año 2015, cuando la variable se situaba en 3%, y hasta antes del 15 de agosto, la tasa de interés en México se mantuvo con una tendencia al alza, acumulando un incremento total de 525 puntos base en el periodo, hasta alcanzar un máximo de 8.25%.

Como antecedente de dicha decisión, recordemos que el pasado mes de julio la Reserva Federal de los Estados Unidos de América determinó también reducir 25 puntos base de su tasa de interés. Cabe resaltar que las acciones del banco central norteamericano siempre son tomadas como referencia respecto de la situación económica y política mundial, por lo que esta resolución se percibió como un indicador de que la "recesión económica" podría ser una realidad.

Posteriormente se han adicionado elementos que han intensificado la incertidumbre y posibilidad de que un estado de contracción económica se haga presente a escala global, tales como el conflicto que el país vecino del norte mantiene con China, a través de la imposición de tasas arancelarias que complican el intercambio comercial; así como la crisis política que se está viviendo en Europa, principalmente en el Reino Unido, debido al interminable debate sobre el Brexit y su forma de aplicación; también Alemania, una de las economías más sólidas y consistentes del mundo, que por primera vez presenta riesgos importantes derivados de complicaciones en su sector manufacturero; o Argentina, que derivado del triunfo, en las elecciones primarias, de un gobierno que en el papel apuesta por elevar el gasto público, restringir el libre comercio y empatiza con la intervención estatal, generó inestabilidad principalmente en los tipos de cambio de varios países de Latinoamérica. Todos estos elementos se han convertido en signos de alarma mundial, que dinamitan las pocas expectativas de crecimiento económico.

Los elementos coyunturales señalados han propiciado la toma de decisiones agresivas por parte de agentes económicos, como especuladores que se refugian en activos de menor riesgo; empresarios que posponen decisiones de inversión, o bien, las reorientan a países de mayor estabilidad, y bancos centrales y comerciales que comienzan a evaluar riesgos y tomar medidas a fin de mitigar los impactos. Todo ello se encuentra afectando a diversos países en el mundo y México no ha sido la excepción.

En nuestro país, derivado del contexto internacional señalado, se presentan ya evidencias de complicaciones; recordemos que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), a través de sus estimaciones oportunas del PIB en México, calculó que en el primer trimestre de este año el crecimiento económico fue de 0.2%, y 0.4% en el segundo trimestre, resultados menores a los obtenidos en ejercicios anteriores. Aunado a esto, los mercados financieros e inversionistas han mostrado preocupación respecto del impacto que tendrán algunas políticas públicas y estrategias del gobierno federal, anunciando que, de continuar así, las externalidades negativas podrían acentuar sus efectos en nuestro país.

Es en este clima adverso que el Banco de México tomó la decisión de reducir la tasa de interés, estableciéndola en 8%, ocasionando con ello una reducción también en el costo financiero de instrumentos como tarjetas de crédito, hipotecas, préstamos y demás, con lo cual se busca expandir el consumo interno y la inversión productiva, a fin de estimular lo más posible la economía local y así retardar al máximo posible los inevitables efectos negativos del complicado contexto económico mundial.

Por otro lado, la medida reduccionista tomada por el Banco de México también podría ocasionar, en el mediano plazo, un incremento generalizado y sostenido de precios, aunque una buena noticia que permite no preocuparnos por esto es que, hasta la fecha, la inflación en México ha presentado mínimos, lo que deja un margen de actuación al banco central para, a través de las tasas de interés, evitar la recesión económica.

El resultado positivo de la estrategia dependerá, en gran medida, de la sinergia que se haga con políticas públicas complementarias; sin embargo, la acción de disminuir en este momento el "costo del dinero" (una definición simple de la tasa de interés) parece ser la mejor opción.

Más vistas

No stories found.
logo
Mi Morelia.com
mimorelia.com