Comenzamos este 2018 con una noticia relevante, Donald Trump por fin logró una victoria como Presidente. Se trata de la aprobación de su reforma fiscal la cual busca favorecer principalmente a los ricos y poderosos lo cual te puede sonar extraño ya que los políticos mexicanos siempre buscan, según ellos, ayudar a los más pobres no cobrándole impuestos y EUA ahora lo hará pero con los más billetudos y con las empresas.
Este tema de la reforma fiscal gringa lo podemos ver desde 2 ángulos: el primero para buscarle sentido al porqué ayudar a los ricos y el segundo para conocer el impacto para México.
Si comenzamos buscándole la lógica de ayudar a los ricos fíjate que es un enfoque interesante y te platico porqué. Lo que la reforma interpreta es que, si le bajan los impuestos a la empresas, éstas se interesarán en regresar a EUA sus plantas lo que generaría un incremento importantísimo en la creación de empleos ya que, si pagan menos impuestos, disminuyen la ventaja que vieron esas compañías en salir del gabacho para buscar mano de obra más barata. Es decir, incrementa de manera directa la competitividad de EUA a nivel mundial.
En el caso de los ricos y millonarios, la idea que tienen es que, si les bajan los impuestos, toda la lana que sacaron del país y que se llevaron a países con tasas de impositivas más bajas regresaran; logrando, con esa repatriación de capitales, inundar a su país con capital de trabajo. Una vez que la lana les regrese no les convendrá meterla a los bancos por lo que la usarían para poner negocios y nuevas empresas, es decir, meterla al proceso productivo generando nuevos empleos y crecimiento económico.
Si te fijas, no suena tan mala idea. El gobierno americano puede hacer 2 cosas para generar empleo: incrementar la plantilla de burócratas (que es una total tontería ya que incrementa el gasto y no produce crecimiento) o incentivar a los empresarios para que sean ellos quienes los generen. Del lado de los empresarios beneficiados podrían ser las micro y las PYMES para generar empleos poco a poco o mejor incentivar a los grandes corporativos para que generen muchos empleos al mismo tiempo y justamente es esta última la que están decidiendo. Allá en el gabacho no se dramatizan ni se envuelven en una bandera para arrojarse al vacío con el argumento de que están defendiendo a los pobres y que como es posible que ayuden a los ricos. ¿Tú cómo crees que se pueda ayudar más a los pobres, regalándoles una despensa y un monedero electrónico cada mes con 2 pesos o dándoles empleos con prestaciones?¿En la teoría no suena tan difícil de entender verdad?
Pero ojo, recuerda que la teoría económica es una cosa y su aplicación en la macro y microeconomía es otra totalmente diferente. Lo aclaro porque parecería que Trump tuvo una súper idea y que resolvió el eterno problema del combate a la probreza y por supuestísimo que no. Este cab…. lo que busca es que toda la lana gringa que ande regada por el mundo se regrese junto con las empresas para después dar el cerrojazo a su estrategia de proteccionismo comercial, es decir, ya que tengo a todos en el corral cierro la puerta y nadie entra ni nadie sale. Yo decidiré con quién hacer negocios y con quién no. Todo lo que produzca aquí mismo se consume y no ocupo de nadie de fuera. Esto es sumamente peligroso ya que, en términos comerciales, todos vamos en el mismo barco y si el qué va manejando (que es EUA por ser el país más importante en términos económicos) se encierra en el baño y no quiere hablar con nadie lo más probable es que ese barco se hunda con todos los pasajeros incluidos.
El otro enfoque que debemos conocer es el impacto de esta reforma en México. Mientras los políticos están más al pendiente de cual contrincante se sacó un moco para poder tirarle lodo, no veo que estén tomando con seriedad este asunto. Si a una empresa extrajera que esté en México o a una propia empresa mexicana le ofrecen que, si se va a EUA sólo pagará el 20% de ISR en lugar del 35% que paga en México ¿tú que crees que decida? El riesgo para nuestro país es que se de todo lo contrario de lo que espera Trump para EUA, es decir, que las empresas gringas de nuestro país se regresen para allá lo que generaría una pérdida monumental de empleos, que la pobreza se dispare, que el de por sí bajo crecimiento económico se detenga y que los ingresos del gobierno por impuestos se derrumben generando endeudamiento y cancelación de programas de infraestructura.
En lo personal creo que este tema de la reforma fiscal es incluso más importante que las propias elecciones para Presidente que se acercan. Ante un escenario de salida masiva de empresas y dinero con consecuencias de inflación, tipo de cambio por las nubes, falta de crecimiento y aumento del desempleo y la pobreza no importa cuál de los títeres que están compitiendo gane. La bombota que le tocaría recibir lo superaría en capacidades y no creo que ninguno de los actuales aspirantes sea un experto en finanzas públicas, comercio internacional y teoría económica como para diseñar una solución revolucionaria.
Todavía nos falta ver si la aplicación de esta reforma se hace de manera correcta pero la verdad yo si ando inquieto de lo que podría suceder si Hacienda y el Gobierno no hacen algo. Sé que es una propuesta totalmente impopular pero todos sabemos, aunque no queramos aceptarlo, que la única solución que podemos tomar para no perder competitividad es la de también bajar nuestro ISR para que las empresas no se vayan y compensar la baja en la recaudación vía el IVA generalizado a una tasa menor a la actual, tal vez el 10%.
Si eres medio chairo sé que vas a quererme quemar en la hoguera por pensar en que un IVA a todo es una buena idea así que, por el momento, aquí le vamos a dejar pero seguiremos con toda atención la ejecución de la reforma gringa. No nos vaya a agarrar cantando la del movimiento naranja mientras nos empinan.
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