Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Del 5 al 22 de enero de este año, se han presentado 351 eventos sísmicos en Michoacán con magnitudes de tres a cuatro y una profundidad de entre cinco kilómetros aproximadamente, los cuales no generan ningún riesgo en las estructuras ni en la población. La mayoría se ha presentado en las cercanías de Uruapan, Nuevo Parangaricutiro, Paracho, Cherán, Tangancícuaro y Peribán.
Así lo confirmó el Doctor en Ingeniería Sísmica y Dinámica Estructural, así como investigador de tiempo completo por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), Guillermo Martínez Ruiz a este medio de comunicación una vez que el Servicio Sismológico Nacional (SSN) dio a conocer este martes el reporte especial sobre la secuencia sísmica presentada en Michoacán durante este mes y que es producto de investigación.
El especialista nicolaita, explicó que a estos eventos que se registran en un tiempo muy corto con epicentros cercanos y magnitudes similares se les denomina "enjambre sísmico", los cuales aparecen de repente sin generar daños o siquiera sentir el movimiento telúrico, pues así como se presentan desaparecen, dijo.
Pero en Michoacán, según el Doctor por la Universidad Politécnica de Cataluña en Barcelona, España, no se había presentado un "enjambre sísmico" al menos con 351 eventos en un lapso de 18 días, pues los anteriores habían sido de 150 movimientos con magnitudes de tres y cuatro, pero desde los años de 1999 y el 2000, por lo cual dicha cifra es histórica al menos en la entidad.
Según los investigadores sobre Ingeniería y Ciencias de la Tierra, la actividad sísmica en Michoacana ha sido "intensa", ya que históricamente, grandes terremotos han ocurrido a lo largo de la Costa como consecuencia de la subducción de la placa de Cocos por debajo de la placa de Norteamérica.
De gran importancia, han sido los sismos del 19 y 20 de septiembre de 1985 con una magnitud de 8.1 y 7.6, respectivamente, ubicados en la interfaz entre las placas de Cocos y Norteamérica, los cuales, ocasionaron daños importantes en una amplia zona del centro del país, pero principalmente en la Ciudad de México.
"A estos sismos, se les llama precursores y ocurren de manera muy superficial, porque las superficies no rebasan los cuatro o cinco kilómetros, por eso decimos que se presentan por fallas locales que pueden generar estas secuencias menores", explicó.
Martínez Ruiz, dejó en claro que estos sismos con poca magnitud no llegan a generar daños a las estructuras, aunque siempre hay una incertidumbre en torno a si se pudiera presentar algún peligro, pero han sido pocos los casos y "muy raros" como por ejemplo el terremoto que se presentó en Italia en 2009 el cual fue producto de una secuencia de magnitudes importantes que llegaba a los 6 en la escala de Richter, el cual, dejó un saldo de más de 300 muertos y miles de heridos.
El especialista, expuso que el riesgo en Morelia, es si se presentara un evento telúrico con características como el del 19 de septiembre de 2017, el cual fue de tipo "pensional", y que además, ocurriera por debajo de la profundidad a 70 kilómetros y una magnitud arriba de los 7.0, eso, dijo, sí sería "peligroso", pero son los más raros.
En los últimos 10 años, el SSN ha reportado diez eventos sísmicos con epicentro ubicado en la entidad y con magnitud mayor de 5.0. El más reciente, fue el del 11 de abril de 2012, cuando se presentó un temblor de poca profundidad y de magnitud 6.4, el cual, tuvo lugar en las costas de Michoacán.
Este sismo, dio origen a un "enjambre" de 20 temblores entre magnitudes de 3.8 y 4.2 en los días siguientes al sismo principal.
México se encuentra ubicado en el contexto de cinco placas tectónicas, el del Caribe, Pacífico, Norteamérica, Rivera y Cocos. Estas últimas dos placas se encuentran en subducción (se sumergen) debajo de la placa de Norteamérica.
Mientras que la placa de Rivera se sumerge bajo Jalisco y Colima, y la de Cocos, lo hace debajo de Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas. Al sur de Chiapas y en Centroamérica, Cocos continúa, pero ahora subduciendo debajo de la placa del Caribe.
La placa de Cocos, está debajo del Océano Pacífico en la costa occidental de América Central, y provienen de la antigua placa de Farallón, que se fragmentó en placas menores hace cerca de 23 millones de años.
Por: Guadalupe Martínez/CA
