Por: Cristian Ruiz/@crisruizr1
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Cuando los payasos Checolín y Tomy, interpretados por Sergio Salinas López y Alejandro Magno Cortés, comenzaron a presentar espectáculos en colonias consideradas focos rojos por inseguridad y violencia, no imaginaron que la idea se convertiría en una política pública a nivel local, la cual fue denominada "Morelia sonríe a la vida".
El objetivo no ha cambiado: recorrer calles de la ciudad para promover entre las familias morelianas valores que incidan en la sana convivencia, el respeto a las mujeres, el cuidado de los adultos mayores y los niños, la prevención de adicciones, mediante mensajes divertidos, de momentos en los que se olviden los problemas.
Según las cifras más recientes que tiene el Instituto de la Juventud Moreliana (Ijum), en la capital del estado hay, al menos, 274 mil jóvenes de entre 12 y 29 años que son susceptibles a las adicciones, depresión y violencia.
En entrevista con MiMorelia.com, Alejandro Magno Cortés compartió que el proyecto de apoyo comunitario inició en abril de este año, en un contexto de alta incidencia de suicidios entre personas de distintas edades y condición social.
"Quedamos sorprendidos con la cantidad de suicidios y casos de violencia que ocurrían en Morelia. Para nosotros era claro que los niveles de estrés, presión social y la depresión en la gente estaban bastante elevados, al grado de llevar a las personas a pensar en quitarse la vida o recurrir a la violencia como una forma de desahogo", explicó.
Cuenta que en su juventud él vivió en carne propia la violencia, y cuando decidió dedicarse de manera profesional a ser payaso se comprometió a promover entre sus rutinas que no está bien generar violencia, ya sea en el hogar, la escuela, en la calle o con la pareja.
"Cualquier luz es una esperanza para que la sociedad cambie; sabemos que existen muchos problemas en muchas colonias de Morelia, por eso diseñamos rutinas donde, no solo le hablamos a los niños, sino también a padres de familia, sobre temas bastante graves como el bullying, la discriminación e incluso el abuso de autoridad".
Sergio Salinas López dijo que enfrentaron cierto recelo o apatía del público que lograron congregar en algunas plazas públicas y escuelas secundarias.
Actualmente los payasos estamos pasando por un momento donde tenemos mala reputación, más que nada porque piensan que somos groseros o que fomentamos el doble sentido; en nuestro caso no es así, y sí nos percatamos de que había personas que no estaban muy convencidas de quedarse en el show; también vimos que la violencia y la inseguridad sí afectan a los pobladores, algunos incluso nos preguntaban cuándo iba a acabar, porque no querían que se les hiciera de noche
Alejandro Magno describió el contacto con los niños como algo gratificante, aunque también algunos padres de familia les agradecieron el momento agradable que les hicieron pasar.
"Después de las rutinas nos dimos cuenta de que, por unos minutos, niños y padres pudieron compartir un momento agradable; también te das cuenta de que estas actividades tan simples, pero tan significativas, pueden servirles como enseñanza", dijo.
Sin embargo, no sólo observaron sonrisas. Durante sus recorridos les fue inevitable observar a jóvenes adictos al alcohol y las drogas.
"En uno de los shows había jóvenes de no más de 15 años consumiendo alcohol, esto se nos hizo algo fuerte, porque te das cuenta de que necesitan ayuda, y a nosotros nos encantaría que las campañas, ya sea de Morelia, del estado o del país, hagan algo al respecto", comenta.
El empeño de estos dos payasos derivó en un acercamiento con la Secretaría de Cultura de Morelia, que les brindó apoyo para que emprendieran una serie de caravanas en asentamientos ubicados en el sur de la ciudad, pero próximamente visitarán también la zona norte.
Según datos proporcionados por los entrevistados, alrededor de 700 personas han acudido a sus espectáculos desde abril.
"Es gratificante ver cómo en estos lugares las familias se acercaron con nosotros para pasar un buen momento. Nos gustaría poder llegar a todas las colonias vulnerables de Morelia, porque sabemos que existen personas que a lo mejor no les va a importar el mensaje de paz que les queremos llevar, pero hay otros que sí, y eso es lo que nos importa y nos ayuda a sentir que estamos aportando algo a la sociedad", apuntó Sergio Salinas.
El propio alcalde de Morelia, Raúl Morón Orozco, ha reconocido que las colonias con mayores índices de violencia, y por ello las que requieren mayor atención, son Villas del Pedregal, La Aldea, Trincheras y Colinas del Sur; en dos de ellas ya llegó la caravana y los participantes esperan que puedan llegar a las otras dos.
Ante la buena recepción que tuvo la primera jornada, en el sur de la capital, la Secretaría de Cultura de Morelia afirmó que mantendrá el apoyo a los payasos para una segunda etapa.
Alejandro Quiroz Sandoval, encargado del Departamento de Cultura Popular, dijo que esta iniciativa, que promueve la paz con carcajadas, tiene el respaldo del municipio para que el mensaje llegue a las colonias más vulnerables, pero también a las escuelas, centros comunitarios o unidades deportivas.
RMR