Consolidación de la paridad de género, agenda pendiente en México

Consolidación de la paridad de género, agenda pendiente en México

El próximo 5 de febrero, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos estará cumpliendo un aniversario más. Es decir, cumplirá 103 años de vigencia desde su promulgación, en 1917, que fue redactada por el Poder Constituyente de ese entonces y promulgada por el entonces presidente Venustiano Carranza, en el Teatro de la Republica, en Querétaro.

Con más de un siglo de vigencia, hay quienes sostienen en el campo jurídico-político que es necesario optar por una nueva Constitución; hay otros que establecen que es necesario descansar (dejar de reformarla) a la misma Constitución, para buscar una reorganización de fondo y trazar nuevas rutas más garantes en pro de los gobernados. Estas ideas, sin duda alguna, son buenas, pero los intereses políticos y económicos que imperan en México evitan la materialización de estas ideas.

En este tenor, es necesario mencionar que en la actualidad nos encontramos ante una nueva Constitución, que sigue resguardando dentro de su contenido la esencia, principios y espíritu de aquella que fue promulgada en 1917. Es una Constitución que ha sido modificadas cientos de veces, con el fin de adaptarla a las necesidades y demandas de la sociedad, pero que no se han podido obtener los resultados esperados; sin embargo, se ha hecho todo lo posible por consolidar el pleno goce y disfrute de los derechos de igualdad, libertad, políticos, seguridad, salud, trabajo, educación, entre otros.

Hay épocas que han quedado marcadas y ensangrentadas en la historia del Estado mexicano, derivado de movimientos sociales que reclamaban al Estado el respeto de sus derechos, y que, una vez concluidos, podemos encontrar la consolidación, reconocimiento y respeto de determinados derechos humanos por parte del Estado. Así pues, actualmente en México, en las últimas dos décadas se ha dado una revolución en materia de derechos humanos, en donde uno de los temas importantísimos y que ha tomado gran fuerza y posicionamiento en las agendas de los diversos poderes e instituciones del Estado es la igualdad, equidad y paridad de género.

Dicen que una de las mejores constituciones del mundo es la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y tal vez sea cierto. En texto, la Constitución es muy garante, pero en práctica es todo lo contrario. Muestra de ello son las severas violaciones de derechos humanos que se cometen hacia las mujeres. Hoy en día, el marco jurídico-político en México se ha ido moldeando para buscar el mayor grado de bienestar de las mujeres, que es algo prioritario que debe buscarse.

Para trazar un nuevo paradigma, más garante para la protección de los derechos humanos de las mujeres, es necesario que se empiece a consolidar la paridad de género desde la política. Se necesita más participación de las mujeres en la toma de decisiones del país, ya que ellas empezarían a trazar nuevas rutas para garantizar de la mejor manera aquellos sectores altamente vulnerables de mujeres, que de alguna manera han sido olvidados. Basta hacer el señalamiento de que hay temas que aún no han sido regulados y, por consecuencia, se siguen cometiendo atrocidades en contra de las mujeres.

Erradicar las barreras que impiden la paridad de género es un tema que ha generado incertidumbre y malestar para algunos, pero es algo que es necesario de hacer. La paridad de género es algo que debe consolidarse de la mayor y mejor manera, pues de no hacerlo, las mujeres seguirán quedando en un estado de vulnerabilidad frente al hombre. Y eso no puede ser permitido en un Estado que dice ser democrático.

Uno de los Poderes que ha asumido la importancia de la paridad de género es, sin duda alguna, el Poder Judicial federal, pues podemos observar que hay un gran número de juezas, que con su labor trazan una nueva ruta en pro de los derechos humanos de los gobernados. Así mismo pasa desde el Poder Legislativo, con la participación de las senadoras y diputadas.

Habrá por venir nuevos y mejores cambios a nuestra Constitución, con el fin de brindar una mejor protección de los derechos humanos de los gobernados en general. Pero para que llegue ese momento es prioritario consolidar, en primer momento, una verdadera paridad de género y romper todas las barreras que las impiden, pues las cosas no pueden seguir así.

Para tener un mejor país es necesario que tanto hombres como mujeres nos sumemos a la toma de decisiones por igualdad de número, para dirigir de la mejor manera al país; la Constitución lo prevé en su esencia, pero los obstáculos los ha puesto la misma sociedad e instituciones, los cuales deben ser erradicados de fondo y a la brevedad posible.

Más vistas

No stories found.
logo
Mi Morelia.com
mimorelia.com