Por: Josimar Lara/@josimar2188
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Churintzio es un municipio que representa el 0.39 por ciento de la superficie de Michoacán y cuenta con poco más de cinco mil habitantes; pero fue ahí donde el joven Gabriel Cruz Mendoza, con 22 años de edad y 1.96 metros de estatura, dio el "salto" dentro del voleibol y de jugar en la preparatoria de su localidad, está a unos días de debutar con la selección mexicana varonil en los Juegos Centroamericanos y del Caribe; que tienen como sede Barranquilla, Colombia 2018.
El seleccionado nacional Gabriel Mendoza platicó con MiMorelia.com sobre cómo fue que en seis años de trayectoria sobresale en un municipio como Churintzio (con 229.21 km2 de superficie), hasta poder representar a México en justas internacionales, como en el Campeonato Mundial de Voleibol sub-23 2017 en Egipto; ahora en una de las justas regionales más antiguas del mundo.
Gabriel Mendoza, quien también ha sido campeón nacional de Voleibol de playa en la CONADEIP, también habló sobre su visión del deporte en Michoacán y lo que hace falta para que más jóvenes destaquen en cualquier disciplina deportiva.
¿Cómo iniciaste en el Voleibol?
-Desde que estaba en la preparatoria, en el municipio de Churintzio, siempre fue mi pasión, como de querer jugar voleibol, al segundo año del bachillerato, miraba muchos videos y sabía que en México había una Liga, por lo que pensaba: Un día tengo que jugar ahí.
Después ganamos unos regionales y participamos en un estatal, que se realizó en la ciudad de Morelia, donde la Universidad Vasco de Quiroga se fijó en mí, me dieron una beca y pude estudiar ahí; después en los eventos nacionales en los que participaba con la universidad; en cada partido me entregaba al máximo, por lo que muchas personas comenzaron a fijarse en mí, me ofrecieron becas en otras instituciones y estados.
Salir de un municipio pequeño de Michoacán, ¿qué representó para ti?
-La verdad fue muy duro, cuando yo les comenté a mis papás que una universidad privada de Morelia me había becado y tenía la oportunidad de estudiar, ellos en un inicio se oponían, porque tenía 18 años y pensaban que iba a agarrar los vicios, andar en "malos pasos", que a lo mejor solo me iban a mandar dinero y que los iba a engañar; pero les respondí que me quería ir a Morelia, porque quería sobresalir, no solo estar en la región, sino poder llegar lejos en otros ámbitos.
Afortunadamente cedieron y me apoyaron; sé que fue complicado, pero ahora le recuerdo a mi mamá; "mira, dónde estoy ahora, ya terminé mi licenciatura, ahora estoy en la selección nacional y tú no me querías dejar ir a Morelia", a lo que sólo le da risa.
¿Crees que tienes un mayor compromiso con tu municipio, al ser un ejemplo de superación?
-Mis amigos en Churintzio saben mi situación y me recuerdan: "Tú estabas en este lugar, en esta situación y fíjate dónde estás ahora".
En los bachilleres he tenido la oportunidad de dar un curso o una plática para decirle a los jóvenes que no sólo se enfoquen en lo local, sino que piensen un poco más arriba; por eso los directores o entrenadores me invitan para que vaya y motive a los chavos, que en un ámbito como el voleibol sé que pueden lograrlo, pero les hace falta ese impulso o empujón y decidan hacerlo, porque no quieren "rebelarse" un poco, como lo hice yo.
Muchos deportistas locales han coincidido que en Michoacán hay talento, pero no hay incentivos económicos suficientes, ¿cómo ves está situación?
-La verdad es que sí hay mucho talento. Yo tengo muchos conocidos dentro del voleibol, que son muy talentosos, pero por falta de un apoyo no han sobresalido a nivel nacional o no pueden representar al país en una competencia internacional.
¿Cómo fue tu llegada a la selección nacional?
-Hubo un torneo en Culiacán, Sinaloa, donde fue mi primer llamado a preselección para la Universiada Mundial en Taipei, China; al año siguiente también tuve una participación en Monterrey con la UVAQ, donde ya me llamaron a la selección; no me la creía, la verdad, porque hay un transcurso, tienes que jugar primero un sub 21, sub-23, para poder llegar a Selección mayor.
Afortunadamente yo me "salté" esas etapas, llegué a selección mayor, no me la creía, pensaba que me hacía falta más talento, pero me dijeron 'ya lo tienes, solo hay que corregir algunos detalles'.
Mi primer torneo fue en Canadá, en donde el desempeño fue bueno, aprendí en mi primer torneo internacional; después tuve la fortuna de que me llevaran a la copa mundial sub-23 en Egipto en 2017 y regresando tuvimos participación en el NORCECA, en Estado Unidos.
¿Qué significa llevar la bandera de México en una competencia como los Centroamericanos?
-Es un orgullo, no sé cómo explicarlo, es algo tan bonito que sientes; me ha tocado jugar varios torneos internacionales y lo mejor que yo siento es cuando cantas el Himno Nacional, ves que hay doce jugadores al lado tuyo; saber que de millones de personas que hay en el país, miles de personas que hay en Michoacán, tú eres uno de ellos, entonces dices: 'Algo tengo, que por eso fui elegido, por lo tanto, tienes que dar lo mejor'".
¿Cuáles son tus expectativas con la selección de México en estos Juegos Centroamericanos?
-Los Juegos Centroamericanos es una competencia muy fuerte, México es uno de los principales rivales a vencer, en la mayoría de los deportes; ojalá tengamos la fortuna de… mejor dicho, sé que vamos a ganar.
Un mensaje que les quieras dejar a la juventud de Michoacán
-No dejen el deporte, a lo mejor muchos se retiran porque no hay el apoyo por parte de la Comisión Estatal de Cultura Física y Deporte (Cecufid), creo que este año es diferente, las autoridades encargadas traen un proyecto nuevo de fomentar a los deportistas.
Por eso, no dejen de luchar, que peleen y que sueñen por lo que quieren, sé que hay mucho talento; con eso y un apoyo por parte del estado, van a lograr todo lo que se propongan.
Gabriel Cruz y la selección mexicana de voleibol iniciarán su participación el 28 de julio en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en donde buscarán superar el cuarto lugar obtenido en Veracruz 2014.
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