Desconéctate y vuelve a tu esencia

Desconéctate y vuelve a tu esencia

"Casi todo vuelve a funcionar si lo desconectas un momento", incluso tú.

No supe quién escribió esta frase, pero hace unos días la encontré guardada en mis archivos del celular, y es que tuve que leerla hasta tres veces para entender que, igualito que una licuadora que trabaja todo el día, funcionamos nosotros. Así de simple, los dos pueden llegar a tronar si los usas sin parar.

Y es que llevar un equilibrio en la vida no sólo es ser conscientes de una alimentación saludable, o ejercitar tu cuerpo de manera periódica. Para llevar un equilibrio es importante aprender a desconectarte para volver a arrancar.

¿Sabes qué es nuestra esencia?
Definitivamente nadie va por la vida con la intención de olvidarnos de nosotros, es algo que simplemente pasa o, peor aún, dejamos que pase.

Y es que vamos por el camino jugando tantos roles que llega un momento en que olvidamos nuestra esencia.

La palabra esencia se define en el diccionario como: Conjunto de características permanentes e invariables que determinan a un ser o una cosa y sin las cuales no sería lo que es.

Somos hijos, hermanos, papás, esposos, empleados, jefes. Pero, ¿recuerdas quién eres tú? La mayoría de las veces resulta bastante difícil describirte sin involucrar un rol en tu discurso, ¿verdad?

Saturamos nuestro día con miles de compromisos, actividades, horarios, citas importantes, y está bien, pues el ritmo de vida al que no sabemos en qué momento decidimos entrar es lo que exige en todo momento. Pero es justo lo que nos impide desconectarnos para recuperarnos.

¿Alguna vez pensaste que te perdiste a ti mismo en el camino? ¿Y que ya no recuerdas quién eras antes de irte vistiendo cada vez con más trajes encima?

Muchas veces resolvemos estas preguntas tratando de convencernos de que así es la vida, que al convertirte en un adulto con más responsabilidades es casi imposible seguir siendo tú… y es que ser tú no debería de cambiar, ni con el tiempo, ni con la edad, ni con el dinero, ni con el mayor de los problemas, porque ser tú es la esencia que, sin importar lo que seas ni en dónde estés, siempre va a permanecer.

Y entonces dejamos pasar muchas oportunidades que se nos presentan para recuperarnos, para reencontrarnos con nosotros mismos, para quitarnos todos los trajes que usamos para representar nuestros roles, y volver a nuestra esencia, "desconectarnos", pero desconectarnos al grado de enfriar nuestros motores para volver a funcionar.

¿Y cómo?
La única forma de volver a nosotros es aprovechar esas oportunidades, incluso buscar el momento del día, de la semana o ya de plano del mes, para desconectarte de todo lo que te satura y volver a hacer click contigo, con tu esencia.

Busca momentos y el tiempo para recuperar tus hobbies, contacta con la naturaleza, pues siempre será nuestro origen; reserva momentos para ti, aprende a escuchar tu interior, aprende a meditar, vuelve a reírte sin parar, incluso de ti mismo; si tienes oportunidad, viaja, baila frente a un espejo aunque no seas el mejor, disfruta cada sabor de lo que comes.

Practica atención plena o mindfulling, escribe en tu agenda una cita contigo, haz una lista de cosas que siempre quisiste hacer y aún no las cumples, pégala en tu espejo para recordar que el tiempo que te dediques a ti mismo no sólo te hará recuperar quien eres y volver a tu esencia, sino que te ayudará a ser el mejor en cada uno de los roles que juegas todos los días.

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