El Proyecto secreto

UN GOBIERNO HUMANO, DE VALORES Y PRINCIPIO

Necesitamos un gobierno para personas de inteligencia y voluntad que se norman por valores y principios, no por pragmatismo o capricho del jefe.

Juan García López no es una persona que reflexiona. Hace las cosas sin pensar, negocios sin planear. Tiene años trabajando y no hay un progreso neto en su vida.

Ante un cambio trascendental, como se pretende, hay que reflexionar muy seria y profundamente. El hombre de hoy hace las cosas maquinal mente, no reflexiona como en el manejo del celular.

Hay que ver si el cambio es verdadero, razonable, si ven la dirección correcta si se fundamenta en los principios y valores del ser humano. Hay que conocer y valorar a los actores, si renovaron su conducta, si se convirtieron a la verdad y transparencia y pueden ser sujetos de cambio.

Las grandes transformaciones de la historia están precedidas por una floración del pensamiento y están acompañadas por la reflexión. Las hacen personas excepcionales por sus virtudes: transparencia, humildad, sinceridad, justicia, servicio a los humildes. (Muchos líderes se fueron con Manuel Andrés porque sabían que estaba arreglado el triunfo y querían parte del botín).

El cambio es todavía una promesa, con las elecciones se presentan sólo los inicios inciertos. Y tenemos una necesidad trascendente de reflexionar, de pensar el paso que va a dar, no Andrés Manuel ni MORENA, sino el pueblo de México.

Las grandes transformaciones han estado preparadas por la búsqueda intelectual de los pensadores, Las ideas preceden a los actos, hacen la transformación.

Cada mexicano es centinela de la nación. Es momento de una reflexión muy seria sobre la gestión de las nuevas autoridades. Debemos leer las señales de Dios en esta situación muy grave que estamos viviendo, en esta crisis terrible, este diluvio que viene.

Los creyentes de Dios pueden leer los acontecimientos grandes y pequeños, las vicisitudes de una nación a la luz del Proyecto trascendente, eterno del Creador. Es el sentido del nuevo "balazo" Proyecto secreto de esta columna de opinión.

Hay que reflexionar sobre la jornada electoral, tratar de entender lo que pasó, las repercusiones en la historia de México, en el caminar político social. Hay que descubrir las mega tendencias, prever el futuro. Así podemos entrar en el proceso social y asumir nuestra parte protagónica.

El triunfo de un candidato y de un partido que provoca euforia en algunos no corresponde a nada que mejore la suerte de todos los mexicanos. Es la misma corrupción de los actores, la misma descomposición social del pueblo, sólo suena un viento nuevo de palabras en la misma realidad, de asesinatos, de impunidad y sufrimiento y llanto. Es el mismo juego de la clase política en desprestigio. Sólo cambian los jugadores.

Es sólo una promesa, en el país de las promesas incumplidas, sólo retórica electorera. ¿Cómo puede creer la gente que ahora si se van a cumplir las promesas? Hay que volver a la realidad, nada ha cambiado, todo está por hacerse.

Queremos entrañablemente el bien de México, pero el verdadero bien. Cuando vemos el mundo como está y vemos más allá de los acontecimientos y no nos dejamos envolver por discursos que han perdido credibilidad, no podemos sino permanecer escépticos, sin perder piso en la realidad de sombras y peligros. No podemos fanatizarnos ni marearnos.

La descomposición social no se detiene, lo observamos en la página policiaca, vamos en caída libre al caos. ¿Será el nuevo gobierno capaz de detener la caída? Un corrupto no puede perdonar los pecados, limpiar otro corrupto, no hacen más que aumentar la corrupción. Con Manuel Andrés militan se han ido hombres públicos que han hecho grave daño, como Napoleón a los mineros y algunos gobernadores de izquierda a los michoacanos.

¿Quién puede cambiar una historia de corrupción, quien tiene la sabiduría, el amor y el poder para liberar el vuelo de México hacia el mundo de serenidad y transparencia de sus íntimos anhelos?

¡Qué bello sería poder creer y gozarse por el cambio verdadero, en un México sin corrupción, sin la clase política viciada que cuando dice: "México" quieren decir: "mi bien y el de mi partido"!

Quien no se alegraría y soltaría de júbilo en un México nuevo, sin discursos y sin políticos que buscan su "yo" y sus intereses mezquinos.

R

Más vistas

No stories found.
logo
Mi Morelia.com
mimorelia.com