Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- El Gobernador Silvano Aureoles debe escuchar realmente a las y los michoacanos que han expuesto argumentos válidos contra la creación de nuevos impuestos, y desistir de imponer seis nuevas cargas fiscales el próximo año, manifestó el diputado Alfredo Ramírez Bedolla.
En el paquete económico 2020, presentado al Legislativo el día de ayer, el Gobierno del Estado manifiesta que a través de la Ley de Hacienda de Michoacán se crearán los impuestos cedulares y ecológicos, a pesar de que esas mismas cargas fiscales fueron canceladas este año por el Congreso del Estado, debido a la falta de claridad en los mecanismos de medición, la desproporcionalidad en el cobro de los mismos y la indefinición sobre su destino y aplicación.
A pesar de los votos en contra de diputados de Morena y PT, en diciembre del año pasado se aprobó la creación de impuestos notariales, cedulares y ecológicos; ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación los legisladores interpusieron una acción de inconstitucionalidad, y los presidentes municipales promovieron una controversia constitucional, además de que ciudadanos se ampararon contra esa miscelánea fiscal.
La inconformidad social y la lucha jurídica culminaron con la cancelación de las nuevas cargas fiscales, apuntó Ramírez Bedolla; sin embargo, dijo que la administración de Silvano Aureoles pretende cobrar el próximo año impuestos cedulares por la prestación de servicios profesionales, y por actividades empresariales, además de los mal llamados impuestos ecológicos.
Los impuestos ecológicos son: por depósito y almacenamiento de la basura, que afectará a gobiernos municipales y ciudadanos; por extracción de materiales que impactará en el sector de la construcción y seguramente encarecerá la obra pública y la vivienda; por emisión de gases a la atmósfera, y de contaminantes al suelo, subsuelo y agua, detalló el diputado de Morena.
Una vez que la Cámara de Diputados ha aprobado el paquete económico de la federación, el Gobierno del Estado seguramente tendrá que hacer ajustes a la propuesta que hizo llegar al Congreso, y enviar una nueva. Esa es la oportunidad de rectificar, pensar en no cargarle la mano a los ciudadanos, a los sectores productivos y a los gobiernos municipales, y sacar de la Ley de Ingresos esos seis nuevos impuestos, concluyó Alfredo Ramírez.
