Inglaterra (MiMorelia.com).- Se trata de un hombre inglés que se desempeña como gerente de una simple taberna en el condado de Wiltshire.
En su hora de descanso y luego de trabajar sus primeras cuatro horas, Amadou Gillen, nacido en Gambia, decidió pasar el tiempo libre jugando un boleto de la National Lottery. La sorpresa llegó cuando empezó a rascar el boleto y la cifra se iba haciendo cada vez más nítida: se trataba del gran premio de 4 millones de euros que sorprendieron a Amadou.
Al saberse ganador, no hubo los grandes festejos esperados, guardó el ticket ganador en su camisa y regresó a cubrir su duro trabajo de 12 horas en la cocina de lugar.
Anunció que comprará un auto, pero no se trata de un espectacular Lamborghini o un Ferrari. Prefiere un simple Peugeot que lo ayude a moverse a él y a sus dos hijas que, asegura emocionado, ya no tendrán que trabajar en un supermercado.
"Me fui a trabajar, completé mi turno y cuando terminé, vi a mi director en funciones, le entregué las llaves y eso fue todo", comentó.