Después de que todo el sexenio ha sido un mal capítulo de los Simpson lleno de tonterías que ya no dan risa, las facturas de la cadena de errores comienzan a cobrarse. En Abril te presenté un nuevo término económico (que de nuevo no tiene nada pero que estoy seguro nunca habías escuchado) llamado Reflación la cual, en términos muy simples, es el choque que se dan al mismo tiempo la inflación y la recesión.
Se supone que este año 2021 ahora si tendremos un crecimiento económico pero no te confundas, será muy pequeño en comparación a lo que caímos el año pasado, es decir, el rebote será mucho menor que la caída original. Lo único que crecerá mucho es lo único que no queremos que crezca: La inflación.
Al cierre de Abril la inflación ya iba en el 6.08% anual que es el doble del 3% que es el objetivo de Banco de México y no se ve que vaya a bajar, tanto así que es la más alta en los últimos 3 años (que es lo mismo que lleva el sexenio pero muchos dirán que es coincidencia) y, antes de eso, no se había visto una inflación así desde el año 2008 cuando se dio la crisis financiera en EUA.
Lo que ha cambiado ahora es que, de manera normal, todos los bancos centrales del mundo buscaban combatir este fenómeno para mantener competitivas sus economías. A partir de este 2021 eso es distinto; los gobiernos del mundo han tenido la prioridad de reactivar el consumo interno mediante incentivos económicos y fiscales así como la inyección de liquidez a los mercados lo que, de manera natural, generará inflación.
Otra cosa que ha cambiado es que antes los bancos centrales buscaban anticiparse a la inflación y ahora prefieren esperar a que se dé para entonces reaccionar ya que pondrán en la balanza el crecimiento contra la inflación dando, por lo menos así parece ahorita, prioridad al crecimiento.
La globalización está dando señales de estar pasando de moda y el proteccionismo se ha comenzado a replicar en más países con más frecuencia. Esto genera una ralentización del comercio internacional y la aparición de inflaciones regionales.
No voy a dormirte con todo el entramado que hay entre la dinámica económica mundial, el efecto inflacionario regional y el catalizador del choque de oferta en las cadenas de suministro a consecuencia de la pandemia. Lo que si te puedo decir es que todo grita que ahí viene la inflación a nivel mundial y México se está viendo afectado por ello junto con las pésimas decisiones económicas que nuestro gobierno ha tomado durante los últimos 3 años.
Investiga, lee y prepara tu patrimonio para enfrentar este inminente efecto. En este momento tenemos tasas reales negativas, es decir, la inflación hace que tu dinero pierda valor más rápido que los intereses te lo pueden recuperar y si no haces algo al respecto tu lana se seguirá haciendo chiquita con el tiempo.
Acércate a un asesor patrimonial (como tu servilleta), aprovecha el abanico de alternativas disponibles y tómate en serio esta realidad la cual todavía durará un tiempo.
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rmr
