Las APPS (aplicaciones) y los datos personales

Las APPS (aplicaciones) y los datos personales

El celular se ha vuelto indispensable en nuestra vida, ya que, por un lado, nos permite estar comunicados con nuestros seres queridos y contactar en todo momento a cualquier persona y, por otro lado, se han creado aplicaciones que facilitan acciones del día a día, y otras que nos entretienen en los tiempos libres.

La cuestión es que este uso indiscriminado del celular y el avance de la tecnología han propiciado que los celulares se conviertan en expedientes personales, porque para obtener las aplicaciones, o para que éstas funcionen, necesitan de nuestros datos, lo que implica que los datos personales estén en constante riesgo: cuando se pierde el celular, o te lo roban, o extraen tus datos personales o la propia aplicación hace mal uso de ellos.

Los datos personales más requeridos por las aplicaciones son: nombre, edad y número de la tarjeta de crédito (así como la fecha de expiración y el código de seguridad), y estos datos se almacenan, no en tu celular, sino en la base de datos de los desarrolladores y dueños de la aplicación, por lo que su uso se sujeta a sus condiciones.

De esta forma, muchas de las aplicaciones son creadas únicamente para robar datos personales, y esto se ha vuelto cada vez más común. Existen aplicaciones que, una vez instaladas, pueden observar, y notifican cuando el usuario del celular inicia aplicaciones específicas como operaciones bancarias o uso de la cámara, lo que les permite obtener mayor información y usarla en su provecho. De esta manera, miles de usuarios han sido víctimas de robo a sus cuentas bancarias o encuentran sus fotos y videos en lugares no autorizados por ellos.

Ante estos hechos, se denota la importancia de leer los avisos de privacidad, términos y condiciones de uso de las aplicaciones; sin embargo, "estar a la vanguardia" a veces no nos da tiempo para ello y, así –en todo momento–, los datos personales están expuestos. Y en ocasiones, el eliminar la aplicación no resuelve el problema, porque la información compartida con la empresa desarrolladora queda resguardada en sus archivos.

Entonces qué tienen que hacer los usuarios para poder aprovechar el cúmulo de aplicaciones que se ofrecen, sin tener que arriesgar sus datos personales:

  1. Tener cuidado con las aplicaciones gratuitas. Generalmente se descargan juegos gratuitos para los momentos de recreo, pero esto muchas veces va aparejado al riesgo inminente de robo de datos personales. Por tanto, en primer término debe verificarse que la fuente de descarga sea confiable, incluso para aquellas aplicaciones que generan un costo.
  2. Leer la política de privacidad para identificar que datos personales serán solicitados y qué tratamiento se les dará. Unos minutos de lectura pueden evitar un daño irreversible a la persona y su patrimonio.
  3. Comprobar los permisos que se conceden a cada aplicación.
  4. Revisar los comentarios de las aplicaciones y siempre comentar aquellas que ya se hayan utilizado para crear una red de comunicación con los demás usuarios de beneficios y advertencias.
  5. Limitar el uso de aplicaciones instaladas en el celular.

Debe considerarse toda medida de prevención y seguridad previa a la descarga de aplicaciones, porque el mal tratamiento de datos personales puede traer violaciones muy graves a la privacidad de las personas y, peor aún, de imposible de reparación.

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