Morelia, Michoacán (MiMorelia.com). En el marco de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que se celebra este 10 de diciembre, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) considera que la conquista y reconocimiento de estos aún enfrentan múltiples retos.
Para esta Comisión la violencia, la inseguridad, la corrupción y la impunidad han provocado un sentimiento de indiferencia hacia las instituciones; por ello advierte la necesidad de articular el ejercicio pleno de las libertades y derechos para lograr la cohesión social y el fortalecimiento de un Estado de Derecho.
En el Día Internacional de los Derechos Humanos para este organismo temas como las desapariciones, la trata de personas y el acoso escolar, son fenómenos que requieren no sólo de la atención de las autoridades sino de la participación social para lograr su atención y erradicación; pues vulneran la dignidad humana.
La CEDH reconoce que la reforma constitucional de junio de 2011 significó cambios sustanciales en materia de derechos humanos, pero acepta que en la implementación efectiva de los mismos aún falta mucho por hacer desde todos los distintos órganos de gobierno.
Esta comisión exhortó a la sociedad para que sean vigilantes de que los derechos humanos no sólo se reconozcan sino se respeten, y a las autoridades para que la observancia y acatamiento de los mismos sea una constante en el desempeño de sus funciones.
El organismo reconoce los avances en la creación del Programa Estatal de Derechos Humanos, pero también observa que en la agenda estatal en esta materia registra muchos pendientes y desafíos que demandan atención urgente, como los temas de violencia, la articulación de esquemas para la protección de las niñas, niños y adolescentes y el tema de la violencia en contra de las mujeres.
Es de mencionar que la Declaración Universal de los Derechos Humanos, fue proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en París, el 10 de diciembre de 1948 en su Resolución 217 A (III), como un ideal común para todos los pueblos y naciones. La declaración establece, por primera vez, que los derechos humanos fundamentales deben protegerse en el mundo entero.
