Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- En estos tiempos de confinamiento por la contingencia sanitaria, el Instituto de la Mujer para la Igualdad Sustantiva de Morelia (Imujeris), Ariadna Maralí Gutiérrez Santos, psicóloga del mismo habló sobre las relaciones familiares y dijo que las crisis "son una oportunidad para analizar cómo hemos actuado y qué podemos hacer para solucionar la problemática al interior de la familia".
Y es que en un sistema conformado por varias personas con algún parentesco de sangre y con aquellas que representan una red de apoyo en la que se pueden generar relaciones sanas o conflictivas. Luego de describir que "la familia es un lugar en el que estamos y en donde se construye la confianza, el afecto, el amor, o en donde por el contrario hay ausencia de ello", dijo que en la familia hay roles como el de los padres y los hijos, y las reacciones son subjetivas porque cada quien las percibe de manera diferente.
En este sentido, explicó que a partir de la aceptación de que puede haber situaciones difíciles y a la responsabilidad individual de considerar mejores formas de comunicación es que se abre una puerta, "y que puede ser sano para nosotros y generar una solución".
Expuso que se requiere trabajar con las emociones y en la comunicación verbal y no verbal para evitar omisiones y agresiones, además de evitar estigmas, estereotipos y desorganización.
Asimismo, describió que hay diferentes tipos de familia, en las que a veces sólo hay un padre, o una madre, o los nietos son criados por los abuelos, dijo que ello no quiere decir que sean familias disfuncionales. En ella se pueden generar las condiciones para una autoestima positiva o negativa.
"La familia es la primera escuela en la que aprendemos a comunicarnos, que puede traer como consecuencia la generación de funcionalidad o disfuncionalidad (…) y entonces viene una dinámica que se repite mucho, dejamos de hablar, aplicamos "la ley del hielo" y se evita la responsabilidad de resolver un asunto", afirmó la psicóloga de Imujeris.
En este sentido hizo un llamado a analizar cómo son los vínculos y cómo se resuelven los conflictos al interior, sin hablar desde el estigma o estereotipo, por ejemplo, el que "una madre debe asumir el rol de protectora, que se sacrifica, que tiene que cumplir con las tareas del hogar, que tiene que estar para todos, no hay roles equitativos, sino que pareciera que ya le toca de manera inmediata.
Parece que a los hombres les toca aportar de manera económica y que tiene el trol de aportar seguridad a la familia. Se le quita al hombre oportunidad, por un lado, pero también que la parte emocional y de tareas es compartida".
Por otra parte, dijo que hay síntomas que se manifiestan en las personas a causa de las relaciones familiares, por lo que hay que atender dichos elementos.
"Hay veces que se juegan juegos de ego y de compensación, por ejemplo, cuando un hijo llega a ocupar un espacio que le corresponde a los padres, lo que puede causar una confusión psicológica".
Por: Fátima Miranda/E
