El mes de mayo del año actual, la revista Forbes México publicó un artículo muy alarmante, principalmente sobre el crecimiento de la obesidad en nuestro país, el cual me llamó mucho la atención y a todos debería preocuparnos, pues México está considerado el segundo país que más gasto de bolsillo tiene debido a este tipo de enfermedades, y los padecimientos que se desarrollan a partir de la obesidad, como diabetes, hipertensión, problemas coronarios, etcétera, representan un verdadero gasto, además de un deterioro en la calidad de vida de quien lo padece.
Hoy, en México debemos invertir tiempo, dinero, educación y esfuerzo en formar un país con una cultura de prevención, sólo así podremos revertir esta epidemia de forma efectiva, pues de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, se estima que para 2030, el 40% de los mexicanos tendrá obesidad y un riesgo alto de desarrollo de enfermedades crónicas, de las cuales siete representan la principal causa de muerte en México.
Según cifras del Instituto Mexicano para la Competitividad, este sexenio se disminuyó el presupuesto en el sector salud más de un 20%, y esto se ve reflejado en la baja calidad de atención que se brinda; hoy en día existe mucha gente que no cuenta con protección en salud, existe también un desabasto de medicamentos, y las personas con este tipo de padecimientos tardan en recibir sus medicamentos o no los reciben completos; además de que en las instituciones públicas los tiempo de espera para recibir atención médica pueden ser incluso de meses.
Según la revista Forbes, en México no existe una instancia que empodere a los pacientes, que informe, asesore, proteja y defienda, sólo existe la instancia de resolución de quejas: la Comisión Nacional de Arbitraje Médico.
Esta epidemia de obesidad no sólo está afectando la calidad de vida del enfermo, el gasto de bolsillo en enfermedades crónicas puede condicionar a una familia a caer en pobreza. Y esto se convierte en un verdadero problema, pues la persona que generaba ingresos puede estar incapacitada para seguir generándolos derivado de una enfermedad crónica.
Estoy convencida de que la principal solución a este problema es enfocarnos a la prevención, y la prevención se logra a través de buenos hábitos, y los buenos hábitos son decisiones que tomamos todos los días en lo que comemos, compramos, en las actividades físicas que realizamos y en el entorno en donde nos desarrollamos que influye a nivel emocional, y es básico tener un equilibrio para evitar enfermedades.
Si seguimos esperanzados en que el gobierno o alguien ajeno a nosotros ponga la solución a un problema que está en nuestras manos prevenir, definitivamente las cifras de incremento de obesidad y enfermedades crónico degenerativas seguirán creciendo a pasos gigantes.
Necesitamos cambiar nuestra mentalidad desde hoy; la información la tenemos en nuestras manos, las decisiones que tomamos son nuestra responsabilidad; invertir desde hoy en nuestra salud resulta mucho más barato que pagar o buscar quién pague por nuestras enfermedades, consume comida real, pasa tiempo al aire libre y actívate todos los días, enseña a tus hijos y a las personas a tu alrededor a tomar mejores decisiones, busca gente profesional que te guíe para tener un verdadero cambio en tu vida, a mejorar y mantener tu salud desde hoy.
Si quieres más información sobre cómo hacer un cambio de hábitos en tu vida y que se vea reflejado en tu bienestar y salud, contáctame a mi correo: esquivelmariaisabel@yahoo.com o en Facebook: Trofología y Alimentación Consciente.
