Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- En lo que va del proceso electoral suman doce denuncias por violencia política con razón de género en Michoacán donde diez de los casos se presentaron por funcionarias y servidoras públicas y dos por precandidatas de los partidos PRD y Movimiento Ciudadano.
Aunque prefirió reservarse especificaciones sobre las precandidatas y servidoras públicas mencionadas, la también secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres, adelantó que se planteará la instalación de una mesa permanente de seguimiento a casos de violencia política.
"La violencia política tiene que ver con el ejercicio del poder y las víctimas no quieren que se sepa hasta que se tenga seguridad de su proceso y piden esperar para pronunciarse al respecto", dijo.
Agregó que con la activista Olimpia Coral se trabaja en la programación de un foro sobre violencia política y digital para quienes participan u ocupan espacios públicos en las dependencias de gobierno, con lo que además se pretende generar una red de apoyo a las aspirantes de Michoacán.
En tanto este día, la Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres realizó el taller "Violencia política contra las mujeres en razón de género" con la participación del especialista en derechos humanos, Pablo Navarrete, quien presentó herramientas jurídicas para documentar y denunciar este delito.
En su intervención, Navarrete consideró que los partidos no son los principales impulsores y defensores de la participación política de las mujeres, ya que quienes han logrado modificar la legislación para garantizar derechos a este sector son las organizaciones sociales y feministas.
Destacó que entre las manifestaciones de violencia política está el "hartarlas y tacharlas de locas para generar un desgaste emocional y renuncien (sea como aspirantes o funcionarias públicas)", a lo que invitó a las participantes documentar en lo posible cualquier manifestación y obligar a las autoridades y partidos políticos asumir responsabilidad y justicia a quienes son víctimas.
Por: Aned Ayala/rmr
