Diciembre es sinónimo de festejar, compartir con los amigos y la familia, disfrutar de las posadas, las fiestas de fin de año y la llegada del aguinaldo. En México, el pago de esta prestación laboral debe realizarse antes del 20 de diciembre, ya que así se encuentra prevista en la ley laboral.
El aguinaldo es un pago de carácter obligatorio para los patrones y los trabajadores, que consiste en, mínimo, 15 días de salario, o bien, la parte proporcional al tiempo trabajado, cuando el trabajador no ha laborado todo el año.
Muchos acostumbramos usar este ingreso para afrontar gastos de fin de año y realizar compras para regalos. Esta idea no está mal, pero también puede aprovecharse de manera más eficiente, como destinarlo a alcanzar nuestras metas financieras, ahorrar, pagar deudas o incluso para la inversión.
Lo primero que hay que hacer al recibir el aguinaldo es ser precavido, ahorrar al menos el 30% de éste y evitar gastarlo en bienes de consumo inmediato. Sé que la tentación es mucha, pues la publicidad de tiendas departamentales es intensa en estas fechas, pero la recomendación siempre será escoger instrumentos formales de ahorro que te brinden rendimientos iguales o superiores a la inflación.
Existen diferentes tipos de instrumentos de inversión, los cuales deben elegirse de acuerdo con tus preferencias y necesidades como inversor, por ejemplo, los de renta variable: son aquellos que al contratarlos se desconocen los rendimientos que generarán al finalizar el plazo, y que suelen tener las utilidades más altas, pero también mayor riesgo de pérdida. Entre ellos se encuentran acciones y algunos fondos; esta última reúne el ahorro de varias personas que al participar se convierten en accionistas de dicha sociedad.
Los de deuda son instrumentos emitidos y respaldados por el gobierno; al comprarlos se puede saber cuál es el rendimiento que se obtendrá al finalizar el plazo; algunos de éstos son los Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes), los Bonos de Desarrollo del Gobierno Federal también son instrumentos de inversión gubernamentales, paga intereses cada 28 o 91 días y los recibes al finalizar el plazo. Es un instrumento seguro y su rendimiento es bajo.
Otro instrumento son los Pagarés con Rendimiento Liquidable al Vencimiento (PRLV), que son títulos a corto plazo que emiten diversas entidades crediticias. Puedes comenzar una inversión desde mil pesos, éste es un instrumento de bajo rendimiento y la garantía la otorga el banco emisor.
No existe una receta mágica que nos diga cuál es el tipo de inversión más apropiado según las características del inversor. Lo ideal sería diversificar los tipos de inversión y conocer cómo opera cada uno de ellos.
Un consejo básico es que antes de pensar en invertir es recomendable saldar cuentas pendientes. Si tienes créditos personales, automotrices o hipotecarios, es importante aprovechar tu dinero para liquidar o abonar a estas deudas; una vez hecho esto, reduces el monto de tus egresos programados, la magnitud de los pagos mensuales y los futuros intereses.
Lo más importante: para evadir la cuesta de enero y aprovechar mejor tu aguinaldo, es necesario elaborar un presupuesto pensando en todos los gastos que debes enfrentar a fin de año y conocer en qué gastas tu dinero; actualmente existen algunas aplicaciones móviles para apoyarnos en la administración de las finanzas personales.
Jesús Melgoza Velázquez
Secretario de Desarrollo Económico de Michoacán
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