Por: Guadalupe Martínez/@Guadalupemtzo
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Las redadas anunciadas por el presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump, sólo han sido amenazas en contra de los connacionales, ya que hasta el momento no hay informes de migrantes michoacanos detenidos, confirmó el secretario del Migrante en Michoacán, José Luis Gutiérrez Pérez.
Aunque hay alertas y una atención especial de las autoridades michoacanas hacia los migrantes que viven en el vecino país, luego de las redadas anunciadas por el republicano, el funcionario, aseguró en entrevista para MiMorelia.com, que afortunadamente no se han registrado detenciones de migrantes michoacanos, toda vez que han atendido al pie de la letra las recomendaciones de los gobiernos..
Pérez Gutiérrez destacó que aunque todavía no hay detenciones por las redadas en contra de los migrantes del Estado, la autoridad de Michoacán ofrecerá atención, y una mayor vigilancia en los consulados donde se brinda información a los connacionales en torno a lo que deben hacer cuando esté cerca el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), a fin de evitar ser deportados con violencia hacia México.
Recordó que el año pasado, se presentaron poco más de 16 mil migrantes mexicanos deportados al país, de los cuales, alrededor de mil 400 fueron michoacanos, cifra que sería la misma para este año, pues a su juicio, las "famosas redadas" no aumentará masivamente el número de deportaciones como se ha dicho por las autoridades norteamericanas, sin embargo, enfatizó en que se mantendrán en alerta.
Recordó que la única información es que a raíz de las redadas anunciadas por Trump, fue el arresto de 20 migrantes, dos reincidentes que habían sido deportados y otros que habían sido detenido en retenes para ubicar a conductores alcoholizados.
Cabe recordar que a principios de julio de este año, el republicano anunció una operación de redadas contra inmigrantes en todo el territorio, para aquellos que se encuentran ilegalmente en el país y que podrían ser más de dos mil personas con órdenes de deportación, principalmente en las ciudades de Chicago, Los Ángeles, Nueva York y Miami.
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