Verónica Serna “la mujer de acero”

Verónica Serna “la mujer de acero”

Verónica Serna Ruíz cruzó la frontera de Sonora en 1998 y relata que la experiencia no fue muy buena, ya que los "coyotes" abandonaron a las personas que estaban supuestas a ayudar a cruzar el desierto. Recuerda haber caminado día y noche, sin comida, sin agua, por lo que regresaron a la zona fronteriza, pero del lado de México.

El abandono de los "coyotes" no fue limitante para ellos, ya que volvieron a intentar el cruce y esta vez, lo lograron. Verónica tuvo la suerte de que los agentes de migración jamás la detuvieron, ni hubo un registro de ella por haber cruzado a Estados Unidos de manera ilegal, lo que le permitió, tramitar su visa de turista, tiempo después.

El destino final de Verónica y de Mario; su esposo, era Nueva York. Su primer trabajo fue en la limpieza de casas y admite que lo más difícil en su proceso de adaptación, fue el no hablar inglés.

"Ahora entiendo y hablo inglés, aunque no lo hablo perfecto, pero ya me defiendo. Y es que en aquellos años, había muy poca gente que hablaba español".
Verónica aprendió herrería y la soldadura estando en México, en el taller de su esposo y este oficio es lo que actualmente más disfruta hacer, junto a Mario y a su hijo, Brandon de 17 años, quien ayuda en el taller, "Vencer Iron Works" en las vacaciones de verano o en sus tiempos libres.

"Somos una familia de soldadores" y orgullosamente atienden personalmente a sus clientes en Sag Harbor, donde se han dado a conocer por su trabajo y experiencia.

"En México me gustaba estar ocupada. Mario tenía su taller y fue él quien me enseñó el oficio. Soldar en México es muy diferente, allá salen chispas y queman, aquí se trabaja distinto y con otras herramientas más modernas".

Entre sus primeros trabajos como soldadora realizó toda la cancelería de aluminio de una casa en México, junto con una ayudante. "Me gusta que el trabajo quede bonito", afirma la paisana.

"Mi sueño americano ya se cumplió de cierta manera, porque nosotros somos indocumentados, excepto mi hijo Brandon, ya que él nació aquí, pero pues hemos logrado tener nuestro taller aquí en Estados Unidos, con mucho esfuerzo y trabajo, pero lo logramos".

La otra parte de su sueño es publicar un libro que actualmente está escribiendo y que trata sobre un arma nuclear en la que el gobierno estadounidense invierte en contratar al mejor científico químico del mundo para inventar una fórmula que pueda servir como arma en una futura guerra.

A Verónica le entusiasma mucho terminar su libro y tener la oportunidad, un día, de publicarlo.

+En memoria de Mario Vanegas.

Andrea Cambron
@laentrevistaconandrea

Más vistas

No stories found.
logo
Mi Morelia.com
mimorelia.com